Según investigadores del Centro Oncológico de Kimmel Johns Hopkins, las células del cáncer de mama evaden el sistema inmunitario, favoreciendo la metástasis o propagación de células cancerígenas al resto del cuerpo. Pero, ¿por qué es importante este hallazgo? Porque, a partir de ahora, se podrían crear terapias dirigidas a este proceso, con el fin de detener las metástasis del cáncer de mama y así reducir significativamente el número de muertes.
Este trabajo de investigación, publicado en la Revista de Biología Celular (Journal of Cell Biology) y dirigido por el Dr. Isaac Chan, concluye que los linfocitos citolíticos naturales o células NK (Natural Killer), un tipo de células inmunitarias, limitan considerablemente la metástasis provocando la muerte de células cancerígenas.
El doctor Chan y sus investigadores estudiaron las interacciones entre las células NK y las células infiltrantes del cáncer de mama en un laboratorio en tiempo real. Determinaron que las células del cáncer metastatizante de mama podían programar a las células NK para que dejen de destruir a las células cancerosas y, en vez de ello, contribuyan a formar metástasis.
En palabras del doctor Chan, “la enfermedad en estado avanzado con metástasis es una de las principales causas de muerte del cáncer de mama y necesitamos comprender más a fondo cómo y por qué ocurre. Nuestro equipo de investigación ha identificado una nueva estrategia a la que recurren las células cancerosas para manipular el sistema inmunitario. Creemos que, si se pudiera revertir o impedir la reprogramación de las células NK en los pacientes, esto podría ayudar a detener la metástasis en el cáncer de mama y reducir su mortalidad.”
Los investigadores, entusiasmados con su hallazgo, ya que este método podría utilizarse para impedir la formación de la metástasis, señalaron que este mismo proceso podría aplicarse a otros tipos de cáncer.
Fuente: https://www.hopkinsmedicine.org/